Cuando visitamos nuevas ciudades, buscamos descubrir su cultura, sus costumbres, sus gentes. ¿Qué mejor forma de hacerlo que conociendo sus barrios? Cada uno con su identidad y su estilo: no hay dos iguales. Por ello, desde Taquilla.com queremos ofrecerte una gran recopilación de barrios españoles que no puedes dejar de visitar. Coge papel y boli e incluye los que vienen a continuación en la ruta turística de tu próximo viaje. ¡Que lo disfrutes!
Barrio del Oeste, en Salamanca
La mejor forma de conocer una ciudad es pasear por sus calles. Más aún cuando éstas se convierten en un auténtico escaparate de arte urbano. ¿Quién necesita museos teniendo el Barrio del Oeste? Con sus fachadas y persianas repletas de grafitis, este conjunto de calles se convierten en un paisaje ideal para un paseo y una buena sesión de fotos. Otra de las originales iniciativas es Quedamos y Punto, promovida por la asociación de vecinos ZOES. Consiste en la decoración de elementos callejeros, como árboles, bicis o bancos con coloridos diseños de lana.
Ambas iniciativas forman parte de un proyecto de reactivación cultural del barrio, llevada a cabo por los vecinos y una gran cantidad de artistas. Entre todos, lo han convertido en una de las zonas más emblemáticas de la ciudad. ¡No lo dejes fuera de tu itinerario!
El Cabanyal, en Valencia
A orillas del Mar Mediterráneo se encuentra el antiguo barrio de pescadores El Cabanyal. Aunque en los últimos años ha estado rodeado de polémica, se trata de un lugar con mucha tradición y encanto situado en un enclave privilegiado. Sus calles se caracterizan por sus casitas bajas de azulejo modernista, de las que no puedes perderte detalle en una relajante paseo. Una visita imprescindible es el Mercat del Cabanyal, en la que encontrarás productos típicos de los Poblados Marítimos. Destaca también por su gastronomía, siendo algunos de sus bares el mejor lugar para tomarse unas tapas: titaina, esgarraet, ajoarriero, puntilla y muchas más. No fallan.
El Cabanyal está en pleno auge, ya que son múltiples las asociaciones que tratan de regenerar la zona organizando constantes actividades e iniciativas culturales. Entre las más sonadas se encuentran Cabanyal Íntim o, próximamente, el Festival de Música Urbana MUV.
Río de la Pila, en Santander
Si quieres disfrutar de las mejores vistas de la bahía de Santander, prepara tus piernas para subir la calle del Río de la Pila o asciende lentamente con el famoso funicular. La identidad de este barrio destaca por la proliferación de bares, comercios y acciones culturales que se puede encontrar en cada una de sus calles. También destaca por su ambiente nocturno, ya que es uno de los lugares preferidos, tanto de paisanos como de turistas, para salir a tomar unas copas y echar unos bailes.
Lo mejor de esta zona es la diversidad de actividades que puedes encontrar. Además para todas las edades y los gustos con un telón de fondo de tejas, mar y montaña. Imprescindible incluirlo en tu ruta si vas a pasar unos días en la capital cántabra.
La Magdalena, en Zaragoza
Este es otro de los barrios que, con la participación de los vecinos y la creación de numerosas asociaciones, se ha convertido en un hervidero cultural. Sus calles se han impregnado de un ambiente alternativo, punto de encuentro de artistas, pintores callejeros y galeristas. La vida social y cultural es muy activa, ya que habitualmente se celebran actividades de diversa índole, talleres, festivales, etc. Incluso, una vez al año, se organiza la Semana Cultural de la Madalena, habiéndose celebrado este año su XXIX edición. Las calles se llenan de música, diversidad cultural y actividades para todas las edades.
La Magdalena es una ejemplo maridaje anacrónico perfecto. El casco histórico de Zaragoza se fusiona con los movimientos artísticos y culturales modernos para que encuentres la mejor oferta lúdica en un escenario único.
Triana, en Sevilla
Hay un lugar que condensa toda la esencia de la ciudad en la que se encuentra y es, sin duda, el sevillano barrio de Triana. El puente de Isabel II, que lo conecta con el centro de la ciudad, se convierte al atardecer en el mirador perfecto para disfrutar de un colorido y bello paisaje con la Giralda de fondo. Las calles de Triana son perfectas para un paseo de cuento, pero si te apetece conocer más sobre su gente y su forma de vida, el Mercado de Abastos es el lugar idóneo. Piérdete entre los comercios y descubre los productos típicos de la zona. Algo te llevas, seguro.
Si ya de por sí, Triana es un monumento, las actividades culturales y de ocio que se organizan en sus calles hacen que sea visita obligatoria en tu viaje a Sevilla. Coge tu mochila, tu cámara y prepárate para uno de los paseos más encantadores de tu vida.